Arte y Arquitectura de los Mayas

Calendario:

El calendario maya es en realidad una combinación de varios sistemas de medición del tiempo. El más parecido al sistema calendárico que se sigue en la actualidad en casi todo el mundo es la llamada Cuenta Larga, que cuenta el tiempo transcurrido desde un punto fijo en el pasado, tal y como hacemos nosotros en relación con el punto fijo de referencia del año en el que se supone nació Jesucristo. En el sistema maya, el punto de referencia es la fecha de la Creación según la religión maya, misma que ocurrió en el equivalente de nuestro año 3114 antes de Cristo. La Cuenta Larga es una serie de ciclos dentro de ciclos, comenzando con el más pequeño (1 día) y progresando en magnitudes de 20 (ver Matemáticas mayas): 20 k'ines (días) = 1 winal; 18 winales (la única excepción a la regla de magnitudes de 20) = 1 tun (aproximadamente un año); 20 tunes = 1 k'atun (aproximadamente 20 años); 20 k'atunes = 1 pik (aproximadamente 400 años). Existen magnitudes cada vez más grandes, pero generalmente la Cuenta Larga se reducía al registro de las primeras 5 (k'ines, winales, tunes, k'atunes y piks —conocidos también como "baktunes"—).

En paralelo a la Cuenta Larga, había un calendario ritual, que constaba de 260 días. Cada uno de estos días era conocido por un coeficiente numérico del 1 al 13, combinado con uno de 20 diferentes números de día. La repetición de una misma combinación entre número y nombre de día se daba sólo una vez cada 260 días. Este sistema también se conoce con el nombre de "tzolk'in".

En combinación con el "tzolk'in" existía un sistema de seguimiento del año solar, conocido como "haab", que combinaba el coeficiente de 20 números (del 0 al 19) con los nombres de 18 "meses", dando así un total de 360 días, a los que se agregaba un "mes" adicional con cinco días "aciagos" (del 0 al 4), con el fin de completar los 365 días del año solar.

La combinación de las fechas del "tzolk'in" y el "haab" dio origen a las fechas de la llamada Ruenda Calendárica, en el que una misma combinación de elementos sólo se daba una vez cada 52 años. Es muy común la combinación de estos tres sistemas (Cuenta Larga, Tzolk'in y Haab) en los monumentos mayas del período Clásico y una fecha típica, expresada en nuestro sistema, se ve más o menos así: 9.15.18.12.14, 4 Ix, 17 Kumk'u, que debe entenderse así: habían transcurrido 9 piks, 15 k'atunes, 18 tunes, 12 winales y 14 k'ines (desde la Creación), la fecha era 4 Ix (en el calendario ritual de 260 días), 17 Kumk'u (en el calendario solar).

La Cuenta Larga es muy importante para efectos de nuestra comprensión del calendario maya, pues gracias a ella se tiene un sistema de datación absoluta que nos permite establecer una equivalencia cronológica con nuestro propio calendario. Y es que una vez que logró determinarse a qué fecha de nuestro calendario corresonde la fecha de Creación maya, es fácil calcular cualquier fecha expresada en la Cuenta Larga. La Cuenta Larga también es importante en otro aspecto, su aparición en el área maya marca el que llamamos período Clásico (en el año 292 de nuestra era) y su desaparición el final de dicho período (en el año 900 de nuestra era).

Además de estos tres sistemas básicos de medición del tiempo, los mayas tenían una cuenta lunar, que contaba los ciclos lunares transcurridos en grupos de 6, intercalando períodos con duración de 29 días con otros de 30, con el fin de aproximarse a los 29.54 días que dura el ciclo lunar (recuérdese que los mayas no manejaban fracciones). También llevaban cuenta de un ciclo del que se sabe muy poco, pero que constaba de 819 días, y que aparentemente estaba ligado con los cuatro rumbos o puntos cardinales, pasando por cuatro diferentes orientaciones, así como un ciclo de 9 días del que también se entiende muy poco. Se sabe también que seguían el ciclo de Venus (de 584 días de duración) y que estaban conscientes de que 5 ciclos de Venus equivalían a 8 años terrestres. Es muy probable que sigueran también la duración de los ciclos de otros planetas.

En las narrativas históricas, es común que la primera acción de una secuencia comience con una Cuenta Larga, más la fecha que le corresponde en la Rueda Calendárica, designándose el tiempo transcurrido entre esa primera acción y la siguiente mediante el uso de los llamados "Números de Distancia", que miden en k'ines, winales, tunes, etc. el tiempo que separa una acción de otra.