Cajete de cerámica policroma cuyo borde inferior adopta la forma de una tortuga. Las paredes del cajete tienen pintadas referencias a la tierra y a la germinación, en tanto que sobre la tapa se pintaron las alas de un ave cuyo cuello y cabeza se alzan para formar la agarradera de la tapa.
Esta vasija es una representación de los tres niveles del mundo: la tortuga que flota sobre el agua (los motivos oscuros entre sus miembros y entre éstos y la cabeza representan las ondas del agua) sustenta a su vez la tierra, representada aquí con agujeros practicados en la tierra, en los que germinan semillas. Finalmente, la tapa-ave cuyas alas se representan al mismo tiempo como alas y como fauces de serpiente y que representa el cielo. Sin aludir a ningún episodio específico de la narrativa de la Creación, esta pieza es una representación del cosmos desde la visión de los mayas.
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