Cajete tetrápode con tapa. El mango de la tapa tiene la forma del cuello y la cabeza de un ave, con diseños simbólicos en el borde de la tapa y en las paredes del cuerpo del cajete.

La forma de la tapa de este cajete es convexa, como es el caso de la mayoría de las tapas de este tipo de objetos. Pintada con colores negro, rojo y probablemente verde (que parece haberse degradado a gris) sobre un fondo color crema, el motivo pintado sobre la tapa es el de un ave con las alas desplegadas y la cola extendida, cuyas plumas están profusamente decoradas. El borde de la tapa está pintado con motivos geométricos que se alternan en colores negro, crema y rojo, en tanto que el mango para levantar la tapa adquiere la forma tridimensional de la cabeza del ave.

Las paredes del cajete están pintadas con la misma paleta de colores, aunque el motivo es mucho más abstracto y difícil de reconocer. A juzgar por la iconografía de otras piezas similares (en las que la tapa representa el ámbito celeste, el cuerpo del cajete la tierra y la parte inferior de la pieza el inframundo), podría aventurarse que el diseño abstracto principal de las paredes es una representación de la tierra. Cabe decir, sin embargo, que esto es sólo especulativo, pues aún es difícil establecer la naturaleza de muchos de los motivos abstractos usados por los mayas.

Las paredes del cuerpo de esta pieza terminan en un reborde saliente, pintado sencillamente con bandas alternantes en colores rojo, crema y negro, y toda la pieza descansa sobre cuatro patas en forma de conos truncados ligeramente abocinados en su parte superior y decorados con una gran mota de color rojo

Esta pieza se halló en la tumba de un niño que debió pertenecer a la nobleza, a juzgar por la joyería de jade que lo acompañaba.

Content 2